Hay que atraer con el exterior, para conquistar el interior

Este post que hoy os escribo es para contaros que me chiflan los regalos.

A ver, recibirlos claro que me gusta y ¿a quién no ?, pero sobre todo  ¡darlos!, eso me encanta. No os podéis imaginar lo mucho que puedo disfrutar; bueno con las fotos que os voy a enseñar de algunos de mis envoltorios, un poquito de idea sí que podéis haceros de lo que es para mí el arte del regalo.

post1,1 post1La verdad es que soy muy afortunada porque, en primer lugar, cuando le hago un regalo a alguien, lo hago ya con alegría, pienso en esa persona, busco lo más apropiado, me gusta preparar un regalo algo mas bromista, divertido y luego ya el regalo serio y oficial, con lo cual no tengo ese pesar de plantearme  “ y qué compro y dónde y no sé qué le gusta y qué horror esto de los regalos”.

Conozco a muchas personas  a las que el simple hecho de tener que hacer un regalo, ya les supone un tremendo esfuerzo por no decir nada del  martirio que les supone hacerlo en fechas señaladas, como por ejemplo en Navidad.Tanto es así que me estoy planteando muy seriamente ofrecer este servicio para todas estas personas que detestan regalar  y que para mí, no sería nada gravoso solamente hay que saber a quién regalar, edad, hobbies, aficiones, color especial , profesión y un presupuesto y….¡tachán!, yo me encargo de todo.

Bueno todo se andará, os prometo que si lo hago os mantendré informados.

Ahora os muestro algunos envoltorios que he ido haciendo, hay muchos que he entregado sin haber hecho ni una sola foto. Aunque utilizo el mismo tipo de materiales en todos ellos, no me gusta repetir, la creatividad es algo que sale espontáneamente  y brota por sí misma …no hay nada escrito.

Como podéis ver, sigo con mis lazos, con lunares sin ellos,estrechos, anchos, cintas, pegatinas, todo me vale, busco la mejor combinación y busco la manera de usar todo y sobre todo disfrutando en el proceso.

Ver la cara de la persona cuando sacas el regalo con ese envoltorio hecho con tanto mimo y cuidado no tiene precio.

Me han pasado cosas tan curiosas como no querer abrirlo ni ver lo que aguarda dentro o prestar más atención al propio envoltorio que al regalo que atesora.post1,4 post1,5 post1,6 post1,7 post1,8 post1,9 post1

La elegancia es cuando el exterior es tan hermoso como el interior

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